En ocasiones, necesitamos cambiar el aspecto de un comercio o, simplemente, reformar los interiores para reorganizar el negocio para cambiar la imagen del mismo. Los materiales y la propia infraestructura se pueden deteriorar con el paso del tiempo y, del mismo modo que hacemos la reforma de un piso, de una masía o la reforma de una casa, también se pueden hacer modificaciones en el espacio de trabajo. Esto es imprescindible para proporcionar confort y bienestar.

La obra que se lleve a cabo no va a suponer ningún quebradero de cabeza. Nosotros mismos nos encargamos de realizar todas las operaciones, tanto si son labores de carpintería como si es necesario realizar un cambio del pavimento. El objetivo es que se logre una nueva apariencia del lugar para conseguir, así, un entorno más cómodo que resulte agradable al público y se muestre una renovación de la estética, algo que puede ser de gran utilidad si se desea mejorar las ventas.

Analizamos el espacio, comprobamos cómo se encuentran los materiales y, a partir de ahí, realizamos los trabajos convenientes: instalación de parquet, instalación de tarima flotante, cambio de ventanas, colocación de puertas, aplicación de pintura de paredes, disposición de pladur para el aislamiento y protección de los muros y otras funciones que, en general, pueden proporcionar múltiples beneficios al negocio.