Para la reforma de un piso es conveniente tener bien estudiado cuáles son las estancias que requieren una intervención. El principal objetivo es un cambio de imagen, donde se disponga de nuevos azulejos, artefactos y muebles, al igual que la renovación de las ventanas y las puertas.

Lo que tratamos de buscar es, fundamentalmente, la configuración de un diseño interior lleno de confort. Así, para llevar a cabo las reformas son esenciales los materiales de calidad, ya que con ellos se puede renovar todos los recursos y eliminar posibles imperfecciones o deterioros. De hecho, la modernización de una casa supone mayor comodidad y la sensación de que hemos conseguido rejuvenecer el espacio.

Trabajo e intervención para una buena reforma

La propia estructura del baño, los sanitarios y el mobiliario configuran el diseño y condicionan el tipo de uso que hagamos. En ellos se puede llevar a cabo el proceso de reforma, del mismo modo que se pueden renovar los materiales del suelo. A su vez, la pintura de paredes se puede cambiar o, directamente, incorporar un alicatado, al igual que la aplicación de pintura de techo. 

Por otro lado, hay que prestar atención al funcionamiento de la calefacción y el estado de los recursos de fontanería. Los tubos deben estar en buenas condiciones, con el fin de que pueda circular el agua adecuadamente, evitar la corrosión y se posibilite el adecuado sistema de desagüe. Además, los trabajos de reforma también pueden intervenir en cambios sobre la grifería, tanto para el lavabo como para la bañera.